Actualización para la comunidad - La esperanza en acción
June 1, 2022
Por Laura Sullivan
Hizo falta un terremoto para cambiar mentalidades en los Países Bajos. El mayor yacimiento de gas de Europa se descubrió en Groninga en la década de 1950. No tardaron en empezar las perforaciones y, con ellas, los daños que se han ido desvelando a lo largo de décadas1. Los terremotos causados por las perforaciones de gas sacuden la vida de la población local, como si el propio planeta intentase decirnos que paremos.
Así que la comunidad local se reunió y pasó a la acción. Plantaron cara durante décadas y acabaron obligando al gobierno holandés a cerrar el yacimiento en 2022 y a la paulatina eliminación del gas en Groninga antes del 20302. A estas alturas casi todo el mundo sabe que los terremotos no son el único motivo para acabar con el gas, sino que este combustible también acelera el cambio climático y amenaza nuestro gran hogar: el planeta
La historia del poder popular para erradicar el gas de Groninga me da esperanza. Y no se trata de un sentimiento pasivo, de sentarse a esperar mientras deseas que ocurran cosas buenas: es una esperanza activa. Una esperanza que nos da seguridad para actuar al ver a otras personas trabajando para cambiar las cosas.
Ese es el propósito de Movemos Europa: trabajar conjuntamente para cambiar las cosas y además inspirar más cambios por medio de la acción. Cuando se suman las actuaciones individuales, desde Groninga hasta Gdańsk, creamos un todo mayor que la suma de lo que podríamos conseguir por separado. Así se hace posible una Europa que priorice a las personas y al planeta.
Este verano tenemos la ocasión de priorizar el planeta. Si ganamos una votación crucial que tendrá lugar en el Parlamento Europeo en el mes de julio, ya no se podrá volver a etiquetar el gas como «sostenible». Y, lo que es mejor, los miles de millones de inversiones privadas que iban al gas podrán canalizarse hacia la energía renovable. Puedes unirte a esta campaña aquí.
Pero la acción climática no es el único campo en el que podemos encontrar esperanza. En 2019, cientos de personas se reunieron en una iglesia de La Haya para celebrar una vigilia que duró meses, para evitar la deportación forzada de una familia3. Utilizaron una ley que impide a la policía entrar en lugares de culto durante los servicios religiosos. Su actuación permitió que la familia se quedase y, después, ¡el gobierno amplió ese derecho a otras familias y 700 menores! Además, su actuación consiguió, a un nivel incluso más amplio, desafiar la cultura punitiva de Holanda4.
Para muestra, otro botón: lo que esta comunidad ha conseguido en favor de las personas refugiadas y migrantes a nivel europeo, desde tomar medidas legales a socavar poco a poco el entramado de Frontex, la agencia que vigila las fronteras de la UE con poca transparencia y mucha violencia.
Y ahora viene la última historia: la de Karin, integrante de la comunidad Movemos Europa, igual que tú. Este mes acudió a Bruselas para conocer a nuestro equipo. Lo primero que me llamó la atención fue lo emocionada que estaba con la Unión Europea. Decía que la Unión Europea obliga a Bélgica a mantener ciertos estándares medioambientales. Eso me hizo sonreír: viene bien que te recuerden que existen razones de peso para que la UE prospere.
Pero Karin quiere ir más allá en materia de fuentes de energía. A las cooperativas energéticas de base comunitaria les cuesta sobrevivir y a la ciudadanía no le resulta fácil obtener información ni apoyo para integrarse en ellas. ¿Y si los miles de millones del Pacto Verde Europeo se destinasen a eso? ¿Y si nos ayudasen a deshacernos de la dependencia del petróleo y del gas de Rusia, Catar, Arabia Saudí y los Estados Unidos? ¿Y si nos ayudasen a acabar de una vez con la dependencia de los combustibles fósiles?
Lo que me encanta de Karin es que no se limita a desear que las cosas pasen sin hacer nada al respecto: se ofrece, aporta ideas, firma peticiones, escribe correos y contribuye económicamente. Ahora hasta se ha puesto a llamar a cargos políticos de Bruselas para que no cometan el error de apoyar el gas en julio. Por cierto, ¡tú también puedes unirte a estas acciones!
Hay muchas razones para mantener la esperanza. Tenemos mucho poder. No lo olvides.
Laura (Bruselas), directora ejecutiva de Movemos Europa
[1] https://www.bbc.com/future/article/20211025-netherlands-the-end-of-europes-largest-gas-field
[2] https://milieudefensie.nl/wonen-zonder-gas/5-vragen-over-de-gaswinning-in-groningen
[3] https://www.reuters.com/article/us-netherlands-asylum-idUSKCN1PO27L
[4] De hecho, en Holanda hay un montón de organizaciones increíbles que luchan por los derechos de las personas y contra la cultura punitiva. Una de ellas es De Goede Zaak, que es socia de esta comunidad.